Me despierto a las 6:00, y prosigo mi camino atravesando las calles solitarias y aun dormidas de Palma del ro. He andado solo nos metros cuando las mejillas se me humedecen, los ojos se me llenan de lágrimas proque cada vez que pongo el pie en el suelo el dolor me rompe el alma al ver que no puedo seguir caminando. ! Sólo he andado 50Km. y no puedo seguir!. El tobillo se me ha sobrecargado y lloro de desánimo e impotencia.
Tras sentarme en un banco y vendarme el pie, sigo sin poder andar. Veo a un técnico del SAS y le comento el problema, y éste en un gesto de solidaridad me lleva al centro de salud. Allí conocen mi historia, me vendan el pié, me proporcionan gelocatil e ibuprofeno y me dicen que el pie no podrá aguantar el camino y que necesito descanso, pero decido continuar aun sabiendo que me puedo quedar en el camino.
Salgo del centro de salud muy bien atendido, además de por los cuidados, me han llenado el corazón de ánimos,dignidad y solidaridad de los compañeros del cntro de salud de Palma del Río.
12´15: Lágrima tras lágrima, pues el dolor me rompe, continúo mi camino por el arcén de la carretera nacional 431, dirección Posadas, donde los compañeros de IU me esperan para darme cobijo.
A las 18h, llego a Posadas, llamo a Felipe, coordinador de IU, después de un saludo y abrazo telefónico me dice que me recogerá Jose, su compañera del alma y de batalla para dejarme en la sede. Jose me deja en la sede después de servirme un espléndido refresco.
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